Fundado por los primeros Señores de Chinchón en el siglo XV, el Parador ocupa el antiguo monasterio de Nuestra Señora del Paraíso, su claustro y escalera originales, y la primitiva iglesia, hoy convertida en una suite muy especial.
El edificio, en pleno centro de la villa medieval, cuenta con amplios jardines y una típica huerta conventual que hoy, llena de árboles frutales, crea un espacio ideal para desconectar y relajarte en la piscina, ubicada en los antiguos establos del monasterio. Ade